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domingo, 31 de julio de 2011

Fallece en México el escritor cubano Eliseo Alberto de Diego García Marruz


Eliseo Alberto de Diego García Marruz (Arroyo de Naranjo, Cuba, 1951), más conocido por todos como “Lichi”, uno de los escritores más entrañables de cuantos han llegado a México en las últimas décadas.


El 14 de julio, de cara a la muerte, sonriendo, sin dejar de vivir como le gustaba, con su cigarro hasta el final, Eliseo Alberto, fallecido este domingo en la ciudad de México a los 59 años, publicó sobre la búsqueda del riñón, y sobre la generosidad de los pocos que donan sus órganos: "Hoy quisiera escribir sin la emoción que siempre provoca la gratitud para así (lúcido, objetivo, honrado en la martiana interpretación de la palabra) poderles contar una historia que me tocó vivir a lo largo y hondo de treinta horas de fe, mil ochocientos minutos de esperanzas, ciento ocho mil segundos de caridad...".

El ganador en 1998 de la primera edición del Premio de Novela Alfaguara con Caracol Beach contó en su entrega de ese jueves en el diario Milenio, la última que haría en vida, la emoción de la esperanza de que por fin pudiera recibir el órgano que podría alejarle de morir: "El martes llamé al doctor Rossano y me confirmó que los dos trasplantes (que precedieron el suyo) resultaron exitosos: "Ya orinan", me dijo, "y yo pensé, al apagar mi último cigarro, que debía brindar con agua de Jamaica por los que aceptaron, con todo el dolor del mundo, donar los órganos de su ser querido. Y brindar por los que tomarán mañana idéntica decisión, y también por mis adorables médicos y enfermeras".

El autor de Informe contra mí mismo fue intervenido finalmente el siguiente lunes pero una complicación cardiaca terminó este domingo con la vida en el Hospital General de México de Eliseo Alberto de Diego García Marruz, mejor conocido por todos como Lichi, uno de los escritores más entrañables de cuantos han llegado a México en las últimas décadas. "Cercano, jaranero, jodedor en cubano, ése era Lichi, al que recordaré sentado en la mesa de casa y contándonos unas historias maravillosas, corrompiéndonos de alegría y risa. Era la broma más feliz del mundo", evocó ayer para El País su paisano Waldo Saavedra.

Víctima de la dictadura cubana, fue declarado traidor por los Castro. Sobre Informe contra mí mismo en una entrevista dijo "es un libro sobre Cuba, que se escribe sólo una vez. A mucha gente le hizo bien, y sin ser pedante sé que si soy recordado alguna vez va a ser por esa obra". En ella emprende "la búsqueda de respuestas a lo qué pasó con la emoción de los años de la Revolución, no con la razón ni con la pasión. Como siempre he dicho: se trata de un libro en el que yo defendí un solo derecho: el derecho a estar equivocado, algo que poco se reconoce y menos por los políticos".

Escribió también Una noche dentro de la noche y Esther en alguna parte. Y además de escritor, periodista y editor, fue guionista de radio, televisión y cine. Entre otros, colaboró con Tomás Gutiérrez Alea en la cinta Guantanamera. Dio cursos en el Sundance Film Institute, y en escuelas de cine de Cuba y México.

Cuando Eliseo Alberto se encontraba luchando por su vida después de la operación, el escritor Jorge F. Hernández fue invitado por el diario Milenio a escribir en su tribuna y sobre él: "Por Lichi confirmé que las crónicas pueden ser prosa perfecta salpicada de poesía pura y que cada jueves uno ha de asumir con resignación honesta que no hay nadie que cuaje una columna tan llena de vida y voces, tan docta en almas y en apuntar la cicatriz de la belleza o el engañoso guiño de la maldad como lo hace Eliseo Alberto cada semana".

"Queda prohibido no donar", escribió Eliseo Alberto al final de su crónica que él nunca quiso que fuese de despedida, pues quería ver como muchos enfermos, "sin que nadie les contara (...) el sol, claro, ¿no lo ven?, salió como siempre a la mañana siguiente. Lo dijo el poeta Eliseo Diego, mi padre: La eternidad por fin comienza un lunes./Salvador Camarena/El País/LIVDUCA

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